Faith Offering / Donation


 

lunes, 22 de enero de 2018

creer, ver, esperar


         Mi ahijado, Brian, de la nada quería un juguete Bendy plus. Yo no se si él se enteró de ésto de alguien en la escuela o si vió un anuncio en el Canal de Nickelodeon el cual él mira con frecuencia.   Nosotros fuimos a todas las tiendas locales para tratar de comprar uno pero ninguna tienda lo vendía así que lo ordené en Amazon.com y lo iban a enviar por correo.  El tiempo de envío era de dos semanas desde la fecha de compra. Yo le dije que lo había ordenado un lunes. Cada día que él preguntaba si el juguete ya había llegado no estaba contento cuando le decía que aún no.  El más aún me pidió si podríamos ordenarlo de  nuevo. No es fácil convencer a un niño de séis años que él tenía algo aunque no podía sentirlo o tocarlo. Aunque está en el correo, ya es de verdad suyo.



            Para muchos de aquellos que practican la oración afirmativa y la visualización nos vemos a veces desafiados por el "tiempo" de los resultados de nuestro trabajo espiritual.  Pero, así como el juguete Bendy de Brian le pertenece, aunque invisible para él todavía, nuestros buenos resultados son nuestros si mantenemos la fe en el proceso. Es este factor invisible que hace que muchos abandonen sus buenos deseso o de aceptar un compromiso. No es siempre fácil mantener la firme convicción de que lo que no podemos ver es nuestra realidad.  Y una de las mayores causas de ésto tiene que ver con nuestras experiencias pasadas.



            Esto es lo que Ernest Holmes dijo en este su  clásico metafísico La Ciencia de la Mente y del Espiritu:  "Nunca limite su punto de vista acerca de la vida basado en las experiencias pasadas.  La posibilidad de la vida está inherente dentro de la capacidad de imaginarse lo que es la vida, respaldado por el poder para producir estas imágenes, de Imaginación Divina.  No es una cuestion de fracaso o éxito. Es simplemente una cuestión de aferrarse a una idea hasta que se convierte en una realidad tangible.  La ilusión depende de la manera en que nosotros vemos las cosas.  Nosotros hemos mirado a la pobreza, la degradación y la miseria hasta que ellas han adquirido proporciones gigantescas.  Ahora nosotros tenemos que mirar a la armonía, la felicidad, la plenitud, la prosperidad, la paz y la acción correcta , hasta que ellas aparezcan.



            Cuando estamos haciendo una demostración (oraci♀n contestada), no ponemos atención a lo que ocurre en el mundo objetivo. Nosotros interpretamos las causas por las condiciones, solamente para realizar que las condiciones deben tomar parte de la naturaleza de sus causas.  Si parece que hay confusión en la condición, entonces debe haber confusión en el pensamiento previo a ella.  No ponemos atención a la expresión objetiva, mientras sepamos que estamos recibiendo el reconocimiento subjetivo correcto. La manera científica de resolver un problema es a diario en el pensamiento de concebir como que ya es un hecho que está siendo alcanzado  en experiencia.  Realizamos que el deseo está ya incorporado en el Absoluto. Nosotros estamos trabajando con nada menos que el Absoluto -----con la Realidad.                                                                                                                                    Durante el proceso, muchas cosas pueden ocurrir que parecen ser destructoras. Podemos pasar por buena y mala suerte, pero si podemos llegar hasta el punto donde no somos perturbados por las "cosas" hemos encontrado el secreto. Si, como dijo Jesús, "no juzguemos según la apariencia, sino que juzguemos con el juicio correcto", recordando que "las cosas que se ven no están hechas por las cosas aparentes",  si, repito yo, nosotros podemos juzgar de esta manera, de cualquier caos podemos producir armonía".

            El proceso empieza con creer. Lo que yo creo para mí mismo debería ser la primera cosa con la cual debemos estar de acuerdo.  Hace varios años yo fuí consejero de una mujer que había pasado varios meses desempleada.  Nosotros afirmamos para un empleo y ella recibió una oferta de trabajo.  En ese momento ella señaló que le encantaría el empleo pero que su único automóvil no estaba en buenas condiciones para ir al trabajo cada día. Yo le pregunté si ella podría verse en un auto nuevo y contestó que no podía. El no creer que ella podría tener un  nuevo automóvil la bloqueo aún de imaginarse de tener un auto nuevo.  ¿Y porqué ella no podía creerlo?  Fue porque ella nunca antes había tenido un coche nuevo.  Ella se había limitado debido a la experiencia pasada.

            Podemos leer en las escrituras y las obras de Platón que "la fe es la evidencia de las cosas que no se ven".  Nosotros proveemos esa evidencia cuando creemos, vemos y  esperamos.
¡Mantengan la fe!                                                                                                                                      Henry Lee Bates                                                                                                                               (Reverendo Dr.)