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lunes, 13 de mayo de 2013

una madre más perfecta, El Camino a Una Vida Maravillosa, Reverendo Bates

      "No es lo que haces por tus hijos sino lo que  tú les has enseñado a hacer por ellos mismos que les convertirá en seres humanos exitosos". - Ann Landers, columnista

                Nosotros honramos a nuestras madres celebrando El Día de las Madres y mi esperanza es que ésta sea una experiencia llena de alegría para todos. Julia Ward Howe fue la primera en proclamar El Día de las Madres en 1870.  Su Proclamación del Día de las Madres fue una reacción pacifista a la Guerra Civil de este país y a la Guerra Franco-Prusiana.  El feriado moderno del Día de las Madres fue celebrado por primera vez en 1908, cuando Anna Jarvis realizó una ceremonia conmemorativa para su madre en los Estados Unidos. Ella entonces inició una campaña para convertir el "Día de las Madres" en un feriado reconocido en este país. Aunque ella tuvo éxito en 1914, ella estaba ya desilusionada con su comercialización por allá por los años 20. El festivo de Jarvis fue adoptado por otros países y ahora se celebra en el mundo entero.

                Pero, para mucha gente El Día de las Madres tráe asuntos con los cuales ellos tienen que luchar. Yo me encontré con un artículo en la revista Psychology Today, escrito por F. Diane Barth, LCSW, donde ella escribe: "Como casi todos mis clientes con familias, Kay estaba tratando de hacer de la manera correcta como padre, tratando, como dijo otro cliente, no hacer a sus niños lo que sus padres le habían hecho a ella". Como Ms. Barth explica más ampliamente en el artículo, muchas personas esperan que sus padres, sean perfectos de una manera idealizada. Cuando esta idealizada perfección no es experimentada, o aún algunas veces destruída, la culpa comienza a formarse en las mentes de los niños y para algunos continúa sintiéndose en sus vidas de adultos.

                Es una actitud dominante que es revelada a los sicólogos y a otros en las profesiones de sanación: "culpan a la mamá por el drama".  Ha sido mi experiencia que esta "culpa" a la  madre, es mucho más frecuente que al padre porque sus vidas han sido difíciles.  La gente inteligente que ha logrado gran éxito en sus vidas aún tienen la idea en sus mentes que si tan sólo sus madres hubieran sido "más perfectas" sus vidas hubieran sido mucho mejor.  Pero, nosotros sabemos que no hay "madre perfecta" sólo mujeres que hacen lo mejor para ser una madre para sus hijos.  Y para algunas madres, la experiencia no ha sido lo que ellas esperaban que sería. Y para otras, es la experiencia más recompensante de sus vidas. Y luego hay algunas mujeres que sienten porque han elegido no tener hijos, o no pudieron tener hijos, que la gente les ve como menos importante que a las madres. Pero, nosotros sabemos que en verdad ésto no es así. Todos nosotros somos igualmente importantes en nuestra experiencia de vida ... no hay mejor ni peor.

                Recientemente en los Estados Unidos ha habido discusiones sobre las "madres que no trabajan" versus " las madres que trabajan" y los valores que están asociados con ambos casos. Como tantas otras cosas que encontramos en el mundo, la  gente mira a las "etiquetas" o "conceptos" en vez de darse cuentra que en esta única expresión de la Vida en que estamos, cada madre, vive en con el sentir dentro de su propia consciencia de quiénes son y cual es la idea de si misma ... y ésto cambia, y cambia con frecuencia. Las etiquetas de "madres que trabajan" o "madres que no trabajan" son sólo eso, etiquetas. Nadies está atrapado en una idea "limitada" de quienes ellos son, a menos que sea su propia elección. Las madres, como todos los demás, tienen más que un deseo y más de un propósito en la vida.

                En la literatura espiritual legítima y las Sagradas Escrituras, ser "madre" es considerado una posición de honor y alquien que se merece honor y respeto ... "honrar padre y madre" ... leemos en los Diez Mandamientos.  Y no es de poca relevancia que Jesús buscó de asegurarse de eso que Su madre fuera protegida aún cuando El mismo estaba sufriendo de manera horrible físicamente y posiblemente mentalmente antes de ser crucificado en una cruz. Cuando honramos a nuestras madres y buscamos asegurar que en vez de buscar que nuestra madres sean perfectas, en vez nosotros debemos buscar ser hijos o hijas más pefectos, viviremos más a tono con el Amor Infinito que da a nuestras madres el deseo de darnos la vida. Nuetras madres eligen ser instrumento del Espíritu Divino que nos trajo a este mundo. Conocemos ésto como la verdad, porque somos la prueba viviente de que así es.

                "Ahora ahí estuvo su madre al pié de la cruz de Jesús, y la hermana de su madre, María la esposa de Cleofás, y María Magdalena. Cuando Jesús por tanto vio a su madre, y a los discípulos de pié , a quienes él amó, él dijo a su madre, ¡Mujer ahí tienes a tu hijo! Entonces dijo a los discípulos, ¡Ahí tienen a vuestra madre! Y de ahí que los discípulos la llevaron a su propia casa". - Evangelio de Juán 19:25-27, La Sagrada Biblia

                Mi madre le dio la vida a doce de nosotros; siete mujeres, cinco varones. Ella fue la fuerza que nos mantuvo unidos despues que mi padre hizo la transición en 1980. Es difícil para la mayoría de la gente imaginarse a una mujer consentir tener doce hijos, pero mi padre y mi madre estuvieron de acuerdo en este número de hijos, y doce son los que tuvieron. Mi madre fue una "madre que no trabajó" fuera de casa pero en ningún momento ella le dijo nunca a mis hermanas que ellas deberían elegir lo mismo. Frecuentemente a mi madre se le podía escuchar decir a sus hijos que ellos podían hacer todo lo que querían si lo querían de verdad. Mi madre no era super religiosa, pero ella tuvo una fe vida que la sostuvo a través de muchas dificultades relacionadas con la crianza de doce niños en una granja en Misuri. Ella nos reunía junto a ella y nos leía pasajes de la Sagrada Biblia para  los domingos por la tarde y nos leía las columna de consejos de Ann Landers durante la semana. Tuvimos buenos momentos y momentos difíciles, pero sobrevivimos como toda una familia. Nunca hubo dudas si fue o no fue una "madre perfecta" sino cuán benditos fuimos de tenerla como nuestra madre.

                Con una visión mas amplia del mundo, no me tomó mucho para realizar que no todas las madres eran como la mía. Aún, yo se y acepto que "una madre más perfecta" que es nuestra no existe. Nuestra madre es/era la madre correcta y perfecta para nosotros. Esta es una verdad que tendrán que saber muchos que luchan con la consciencia espiritual para creer y aceptar, pero de cualquier manera es la verdad. Creer lo contrario sería creer que D-s está presente para algunos y no para otros ... que D-s bendice a algunos y no a otros ... o pero aún, que D-s es un dios de recompensa y castigo. Eso nunca puede ser la verdad. Tal vez nunca en esta vida podamos comprender porque nosotros hemos tenido la madre que tenemos ... ya que nuestra relación sea amorosa o antagonista ...  hay cosas infinitas que nosotros tenemos aún que conocer acerca de la Vida y nuestra relación con ella. Demos una mirada a ésto del Libro del Eclesiastés 11:5 nuevamente: "Como tú no sabes cual es al camino del viento, o cómo crecen los huesos en el vientre de la mujer encinta, así ignoras la obra de Dios él que hace todas las cosas".
                Hay una gran alegría en sentir que D-s nos ha dado aquello que es lo más grande y mejor buen ... y eso incluye a nuestra madre. Encontremos alguna manera en la cual nosotros podamos  honrar esta opción que nuestra madre hizo para traernos a esta vida, no importa dónde puede estar nuestra madre, ya sea aquí o en el más allá, aún si no estamos en buenos términos con ella ... experimentemos la vida, la dádiva y el perdón del Espíritu que vive en  nosotros y encontremos nuestra manera de mostrar nuestra gratitud, nuestro amor, y  nuestra comprensión de que la elección que hizo nuestra madre es importante para nosotros hoy y todos los días.
Y ASIES!
¡Mantengan la fe! 
Reverendo Henry Bates