Faith Offering / Donation


 

lunes, 21 de octubre de 2013

el poder de la fe en la oración, Reverendo Bates

            

"¿Rezas algunas veces, " Oh Dios, derrama Tu presencia sobre mí? Si es así, la imagen de tu experiencia debe ser aquella de Dios inmediatamente sobre tí, derramando Su esencia sobre tí. Dicha experiencia tal como si nunca ha ocurrido en la vida de nadie. No ocurrirá para tí Las posiciones están equivocadas. Es verdad que Dios está sobre tí; El también está debajo de tí y alrededor tuyo. Pero desde ninguno de esos puntos El se derrama  para tí. De cualquier manera que El Mismo Dios se derrama para tí lo hace en tí, y a través tuyo hacia el exterior.  Tu contacto vital con El viene de tu tocar Su presencia interna. Adentro, él sale El Mismo como tú, espiritualmente; a través tuyo, mentalmente; sosteniéndote, físicamente. No es la vida en la huerta sino la vida en el árbol individual produce el fruto del arbol. Cuando tú sabes donde tú contactas a Dios tú estás en relación a El que te permite que recibas Su derrame sobre tí. Entonces El se entrega en tí, y tú eres bendito en todas formas". - Imelda octavia Shankllin, What Are You? [1929] [¿Qué Eres Tú? (Traducción libre no autorizada)]

            En esas palabras de Imelda Shanklin la mayoría de nosotros aprenderá algo que es nuevo para sí y para otros, encontrarán que las palabras que ella usa para descubrir este
aspecto de nuestra relación son D-s muy diferentes como ha sido explicada antes. ¿Cómo D-s Inteligencia Espíritu y Poder trabaja dentro de nosotros? Esto es por lo que yo aprecio su simple ilustración en relación a la huerta y al árbol individual. Intelectualmente suena como verdad, pero todavía es un misterio que tal vez nosotros alguna vez seamos capaces de descubrir un sentido de eso y no más. Son esos aspectos de D-s que son misteriosos o desconocidos para nosotros que hacen la demanda de nosotros para estar más conscientes de nuestra relación con D-s. Todos nosotros tenemos una relación con la Vida, con Amor, con la Verdad, con la Inteligencia, con el Espíritu, con el Alma y con el Principio ... y todos esos son aspectos de D-s.  ¿De qué otra manera nosotros podemos describir Algo tan infinito, tan misterioso y aún tan personal para todos y cada uno de nosotros?  Hay algunos que dirán la Fuente, la Mente, la Causa, el Todopoderoso ... pero esos son solamente sinónimos de la palabra D-s ... es un intento para definir que Algo que es tan infinito en Poder, Espíritu e Inteligencia que nuestra mente humana no puede nunca entenderlo.

            La señorita Shanklin nos da algunos consejos profundos y beneficiosos si nosotros tenemos "oídos para escuchar" ... "No se avergüense por la declaración de que usted pueda llegar a estar consciente de Dios en usted, haciendo Su perfecto trabajo.  No se sienta demasiado valiente por eso. Sea sensible, confiado, modesto. El manantial fluye crecientemente para tí cuando tú agrandas la salida. No haga comparaciones entre su vida y las vidas de otros. Deje que la mente de Dios piense en usted. Deje que la vida de Dios viva por usted. Cuando su pensamiento vive en los trabajos poderosos de aquellos que han sabido como dejar a Dios expresarse, diga, " Ya que Dios ha hecho esta cosa en otro, El lo hará en mí cuando mi receptividad a El iguale a la receptividad de quien El ha hecho ya este trabajo". No mida su vida por la vida de otro; mantenga sus pensamientos en la consciencia de que todo lo que Dios requiere de usted es ser pasivo para El. No piense en la agencia, sino en la grandiosa manifestación de Dios, cuando quiera y cuando quiera que ocurra; diga, "Ya que Dios ha hecho este trabajo en uno El hará mayores trabajos en mí cuando  la receptividad a El sobrepase la receptividad de uno en quien El ha hecho este trabajo". ... Usted es el creador de su propia consciencia".

            Cuando nos convencemos que podemos tener aquello que deseamos podemos encontrar un duro alegato en contra nuestra dentro de nuestros propios pensamientos e ideas acerca de la vida. La señorita Shanklin nos da la mejor posible dirección cuando ella nos aconseja a no compararnos con nadie más.  Las comparaciones contienen una certeza para estancar nuestras oraciones y nuestros buenos deseos. El Espíritu no puede trabajar por medio de las comparaciones o pensamientos de competencia cuando estamos llevando a nuestra mente todas estas cosas no solamente nosotros sino a también a alguien más. Nuestra mente debe estar libre y nuestros pensamientos deben permanecer en el bien que buscamos alcanzar para el Espíritu expresar esas cosas a través nuestro ... a través de nuestra propia consciencia. ¿Cómo puedo verme demostrando buenos resultados por los que yo rezo cuando mis pensamientos están entremezclados con pensamientos de competencia y comparación? No podemos. Estaríamos creando división y se validará de alguna manera en nuestra experiencia de vida.

            Demos una mirada a estas palabras de la Srta. Shanklin: "¿Reza usted para prosperar de manera que pueda darle a otros? Si es así, cambie su oración; ore para que otros prosperen. La única manera en la cual usted puede duplicar A Dios en materia de dar es dando lo que usted ya tiene. ... De manera práctica, usted encontrará que compartir y la esperanza son el inicio de un crecimiento económico". Cuando nosotros compartimos lo que tenemos la provisión que esperamos continúa, nuestra prosperidad comenzará. Y de la Srta. Shanklin: "La provisión o abastecimiento viene de la fuente esperada en la manera esperada".  Y, "El abastecimiento o provisión viene de fuentes inesperadas, en maneras inesperadas".  Nosotros debemos establecer ambas verdades en nuestra consciencia repitiéndonos a nosotros mismos que está es nuestra verdad hoy y siempre.

            Para aquellos que piensa que sus oraciones no son contestadas, yo les aseguro que son respondidas. Tal vez la evidencia aún no ha sido revelada, pero así será. Todos nosotros estamos experimentando lo que creemos ser verdad acerca de nosotros mismos y de otros. Todos nosotros estamos experimentando lo que le damos a otros y la manera en que les damos. Nosotros todos estamos experimentando lo que retenemos de otros y la manera en la que lo retenemos.  Esas son leyes universales, leyes inmutables del Espíritu y ese Espíritu está dentro de ustedes y de mí, y esas leyes se expresan a través de nosotros. Si creemos que ésto es verdad o no depende de nuestra consciencia sobre la evidencia que nos es revelada en nuestras experiencias de vida. Nuestra vida debe estar llena de alegría. La alegría de dar y la alegría de recibir aún más para dar. Todo eso que estamos dispuestos a dar se hace disponible para nosotros si sólo comenzamos a realizar que estamos aquí para duplicar a D-s como vida, perdón y generosidad ... estamos aquí para ser benditos, para prosperar y para revelar la buena vida, la vida abundante y la vida maravillosa que es nuestra experiencia.

            Y de Emmet Fox podemos leer: "Si vuestras oraciones no son contestadas algo está mal. El universo es gobernado por leyes, y no existe ninguna ley rota.  Jesús mismo no rompió la Ley de Ser cuando hizo sus milagros; él no pudo y no lo hubiera deseado. El cumplió con la ley cuando rezó. Cuando nuestras oraciones no son respondidas debe ser porque usted no ha cumplido con las condiciones de la ley, y, noventa y nueve de cien veces, es porque a usted le falta un sentido de amor por todo. Es una ley cósmica que el Amor sana y que el temor y la condenacion dañan y destruyen. Trátese usted mismo para el Amor  cada día y observe sus pensamientos, y vigile su lengua y vigile sus acciones, que nada contrario al Amor encuentre expresión ahí".

            Repítase estas cosas a usted mismo: "Mi consciencia es mi vida. En Dios yo vivo, me muevo y tengo mi ser. En mi Dios vive, se mueve y tiene expresión". Albergue estas palabras en su mente cada día, siéntese en silencio en la presencia de la Inteligencia que cubrió su espíritu en forma humana, y el poder de la fe en sus oraciones le dará dominio y autoridad por sobre todas las cosas que le conciernen, garantizado.

¡Y ASI SEA!

¡Mantengan la fe!
Rev. Henry Bates