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martes, 7 de febrero de 2017

mentes mezcladas

          Vivimos en un mundo de cambios constantes y dependiendo del nivel de como recibimos los eventos, las opiniones y la alerta de esos cambios , nosotros nos vemos afectados en un profundo nivel en nuestra mente.  Algunos le llaman nivel subjetivo, otros pueden verlo como el nivel subsconciente de la mente.  De cualquier manera, lo que sea con que nosotros grabemos  nuestra mente crea un efecto correspondiente.  El maestro metafísico y autoridad en la ciencia de la mente, el Dr. Robert Bitzer, declaró que nosotros debemos tener mucho cuidado a dónde llevamos nuestra consciencia.  En otras palabras, debemos estar alerta de los efectos en  nuestra propia alma que tiene aquello que escuchamos, aceptamos y hacernos conscientes de esas cosas cuando impregnan nuestra mente en un proceso llamado mentes mezcladas, mentes revueltas;  la mente dominante nuestra o la mente de alguien que domina nuestra mente y crea un cambio en las creencias.

            Ahora, ésto es una "espada de doble filo" como quien dice, porque nosotros podemos usar este mismo principio ya sea para el bien o algo aparentemete negativo.  Lo siguiente, lo cual yo comparto en su totalidad, de un artículo escrito por el Dr. Joseph Murphy para la revista New Thought Magazine [Revista del Nuevo Pensamiento (traducción literal no autorizada)] en 1959 titulado "Quimby's Method of Treatment" [Método de Quimby de Tratamiento (traducción literal no autorizada)] e ilustra el poder de sanación de las mentes mezcladas:   Phineas Parkhurst Quimby una vez llamo a una mujer envejecida, coja, agachada, y con muletas.  El declara que su dolencia se debía al hecho que ella estaba aprisionada  por un credo tan pequeño y contraído que ella no se podía parar derecho o avanzar.  Ella estaba viviendo en una tumba de miedo e ignorancia;  aún más, ella tomaba la Biblia literalmente, le asustaba.  En esta tumba, Quimby dijo,  la presencia de Dios estaba tratando de reventar las barras, romper las bandas, y levantarse de entre los muertos.  Cuando la mujer le pedía a otra gente una explicación sobre algún pasaje de la Biblia, la respuesta sería como una piedra,  y ella sería el hambre para el pan de la vida.  El Dr. Quimby diagnosticó su caso como una mente nublada y estancada debido a la exitación y el miedo causados por la incapacidad de ver claramente el significado de los pasajes bíblicos que ella había estado leyendo.  Esta condición se reflejó en su cuerpo por medio de un sentimiento flojo, el cual terminaría en parálisis.
            Quimby le preguntó a la mujer que quería decir, "Sin embargo poco tiempo estoy con ustedes, y luego voy al que me envió".   Ell respondió que quería decir que Jesús  se fue al cielo.  Quimby dejó en claro que el pasaje realmente quería decir que la interpretación era que estando con ella "un poco tiempo" significa que su explicación de sus síntomas, sentimientos y su causa, eso es, él tenía compación y simpatía por ella por el momento, pero que él no podría permanecer en ese estado mental;  el próximo paso era ir a "él que me envió",  lo cual es la presencia de Dios en todos los hombres.
            Quimby inmediatamente fue a su mente y contempló perfecta salud, lo cual es parte de Dios.  El le dijo a la mujer,  "Por lo tanto, donde yo voy, tú no puedes ir, porque tú estás en la creencia de Calvin, y yo estoy en la salud".  Esta explicación produjo una sensación instantánea en la mujer, y un cambio se produjo en su mente.  Ella caminó sin muletas.  Ella había estado, como si estuviera, muerta en el error, y traerla a su vida o la verdad fue como levantarse de entre los muertos.  "Yo cité a la resurrección de Cristo y la apliqué a su propio Cristo o salud;  eso produjo un poderoso efecto en ella". (Quimby Manuscripts)
`           Aplique este principio de sanación en su propia vida.  Suponga, por ejemplo, que su hijo está enfermo. Vaya a su interior a él quien lo envió.  Dios, o la Vida, nos envió a todos nosotros a este mundo, y le dió forma a todos tus órganos desde su propio patrón invisible. Tú estás ahora volviéndote al creador de tu cuerpo.  Tú estás relajado, en paz, preparado, en calma.  Tú estás lleno de confianza en que el Creador de tu cuerpo y de tu mente puede crear y restaurar tu cuerpo de acuerdo con su propio patrón divino.
            Tú has visto a tu hijo enfermo y con dolor, pero ahora en tu meditación tú estás hablándole a Dios-presencia, haciendo un llamado al poder de sanación. Piensa en tu hijo e inmediatamente alójate en la paz, la salud y la armonía de Dios.  Tú sabes que esas cualidades, potencias y aspectos de Dios están ahora reflejándose en tu hijo.  Tú estás ahora entrando en la atmosfera mental de la salud.  Como hizo Quimby,  tú estás contemplando al Ideal Divino, el cual es la perfección, la integridad y la armonía para tu hijo. Haz ésto frecuentemente, trés o cuatro veces al día, hasta que tú creas en la idea de la salud perfecta.  Cuando tú haz aceptado mentalmente la idea de que el poder de sanación de Dios está trabajando para tu tijo, eso es un tratamiento.
            "Tú me buscarás, y no me encontrarás",  significa que otros pueden preguntarse  lo que tú estás haciendo y ser incapaces de seguir tu entendimiento o tu creencia.  "Y donde Yo estoy, allá ustedes no pueden ir".  Otros miembros de tu familia, o el paciente mismo, no puede ser capaz de elevarse en consciencia y entrar en los sentimientos de perfecta salud, porque ellos están envueltos en las creencias mundanas. Quimby djo que la crencia falsa del hombre es el sepulcro en el cual está confinada la sabiduría de Dios, y que la verdad es el ángel el cual desaloja la piedra de la superstición e ignorancia sanando la mente y el cuerpo.
            La palabra "tratamiento" usada en los círculos del Nuevo Pensamiento  quiere decir la interacción armoniosa y la dirección de los poderes del consciente y del subconsciente para un propósito definido, específico.  Al tratar a otros o a nosotros mismos, nosotros nunca nos identificamos con la enfermedad.  Tenemos mometaneamente compasión por la persona "Sin embargo por poco tiempo estoy contigo"; luego vamos a Dios y al cielo, realizando la perfección ideal del paciente.   La farisáica, hipócrita (miedo y duda) no puede entrar donde esta la confianza en el poder de Dios.  En la oración nosotros somos uno con Dios, la única presencia y poder.
            He aquí una instancia de cómo una mujer aplicó esta técnica en el tratamiento de su niño.  Su niño estaba muy enfermo. , y la  esperanza de salvar su vida había sido perdida por todos excepto la madre.  Ella se sentó en la cama del niño en el hospital y dijo la sigjuiente oración:  "Dios es la vida de mi hijo, y Su poder sanación está fluyendo a través de cada átomo de su ser.  La paz de Dios llena su mente y su cuerpo, y por medio de Su poder mi niño se hace íntegro".   Ella repitió esta simple oración en silencio una y otra vez, tratando de elevar la idea de la salud en su mente. Ella sabía intuitivamente e instintivamente que a medida que ella continuara orando llegaría al punto de paz interna acerca de su hijo.  Después de varias horas, el niño empezó a pedir comida. El doctor examinó al menor y dijo que la crisis había pasado. Ella había realizado la verdad la cual la hizo libre.
            Nuestra razón y los sentidos pueden cuestionar, ridiculizar, mofarse y reírse, pero si nosotros solamente vamos a nuestro interior, sabiendo que cuando nosotros sentimos que algo es la verdad, la Omnipotencia se mueve a nombre nuestro, entonces aunque el mundo entero lo  niegue, nosotros demostraríamos nuestro deseo, porque estamos sellados en la fe.  "De acuerdo a tu fe te será concedido".


           
Habrá aquellos que serán elevados y más fuertes en su fe con lo que ha escrito el Dr. Murphy y por lo que logró el Sr. Quimby y habrá también aquellos que no pueden concebir que ésto sea verdad.  De cualquier manera, para todos aquellos que se han dado el tiempo de leer ésto, sus mentes han cambiado porque sus mentes se han mezclado con las mentes de aquellos de gran fe.

¡Y asi sea!

Rev. Henry Bates

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