La verdad que es tejida a través de toda la sabiduría de los tiempos es que
D-s es Inteligencia y que nosotros vamos a hacer uso de las leyes espirituales
que gobiernan nuestra relación con D-s y la Vida, debemos hacerlo inteligentemente. Todo lo que
necesitamos en un cualquier momento dado
está disponible para nosotros y en vez de creer que a algo dentro de nosotros
le falta nuestra habilidad para recibir
nuestro bien, debemos afirmar y desarrollar la fortaleza mental para saber que
todo lo que necesitamos; fe, conocimiento, etc ... nosotros ya lo tenemos. Es inherente dentro de nosotros buscar
nuestra conexión con el Poder, la Inteligencia y el Espíritu (la Mente) que es
D-s. Cualquier falsa ilusión de separación de D-s es el error del apego de la humanidad
a lo físico y la creencia que lo "real" es material en lugar de
espiritual.
El místico estadounidense
Ernest Holmes escribió en su libro "This Thing Called You":
"El genio espiritual de Jesús mora en su
conocimiento de las leyes espirituales. El se atrevió a creer en la Fuente
invisible de su ser, y confiar en ella.
El no se vió amedrentado por la tormenta ni por el miedo de otros. El pudo decir, "Paz" a ambos. El fue capaz de sacar a la superficie la paz
de otros. Esto es "lo profundo
llamando a la profundidad". Es Dios
llamando a Dios. Es Dios respondiendo a
Dios. ... Ponlo firmemente en tu consciencia que tal como hay leyes de la
física, hay leyes espirituales y mentales las cuales actúan en una manera
idéntica. Tengan confianza en las Leyes
de la Mente y del Espíritu, y vuestra habilidad de usarlas".
La manera en la cual
ganamos confianza en algo es repetirnos a nosotros mismos que tenemos confianza
en nuestras habilidades y talentos y afirmar cada día que ésto es la verdad
acerca de nosotros. Nuestra mente es un poderoso instrumento de nuestra alma.
Debemos usarla con confianza y fe.
Debemos creer en nosotros mismos y desarrollar la confianza en saber que
nuestra mente usada inteligentemente es más poderosa que cualquier cosa con que
nos confrontemos. Podemos usar nuestra mente para hacernos independientes y
establecer la determinación para tener éxito en todo lo que hacemos, para ser
sanos y ser felices.
Ernest Holmes compartió
esta sabiduría con nosotros: "Con una bondadosa
flexibilidad contigo mismo, aprende a pasar de la confusión a la paz, de la
tristeza a la alegría. No hay ley para tí sino la que establece tu propia alma,
bajo la única gran Ley de toda vida. Enciende la Luz interior. Cree en tí
mismo. Ten confianza los grandes impulsos que vienen a tí. Escucha profundamente a la Naturaleza Divina
que eternamente se Entrega a tí. El Espíritu es absoluto, ilimitado y siempre
disponible. El Espíritu está ahí mismo
donde tú estás. El Espíritu llena todos los espacios, fluye a través de todas
las formas, crea todo, gobierna todo por medio del amor, controla todo a través
de la ley, expresa la vida y la belleza en todo".
Dediquemos nuestro tiempo
a pensar acerca de lo que queremos experimentar en nuestra vida. Pensemos acerca del grado de salud que
aceptamos para nosotros mismos. Pensemos
acerca del nivel de riqueza que queremos realizar para nosotros mismos. Pensemos en la belleza pura que nuestra alma
siente cuando experimentamos felicidad y alegría. Construyamos dentro de nuestra
mente, nuestro corazón y nuestra alma un "cielo" tan espléndido y tan
maravilloso que nuestros pensamientos nos elevan por sobre todas las
apariencias negativas que nos confrontan.
Miremos por sobre lo físico y lo material y afirmemos las grandes cosas
que aún experimentaremos a través del poder de nuestra mente a tono con la
infinita Inteligencia, Poder y el Espíritu que nosotros llamamos D-s. Con persistencia más pasión por el bien que deseamos nosotros asegurarmos los resultados
positivos que queremos.
Tomado del gran Ralph
Waldo Emerson: "Levántate
cada mañana con la determinación de ser feliz para poner nuestras propias
condiciones para los eventos de cada día. Hacer ésto para acondicionar las
circunstancias en lugar de ser acondicionado por las circunstancias."
¡Y ASI SEA!
¡Mantengan la fe!
Rev. Henry Bates
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